jueves, 14 de abril de 2011

Sueños


Imaginaos que pudiéramos elegir

A un lado una vida tal cual la conocemos, con nuestros días buenos y malos, con nuestros aciertos y errores, sueños y fracasos, objetivos y metas. Una vida que vivir disfrutar y sufrir en base a un conocimiento que se nos ha dado. Una capacidad para razonar y discernir todo lo que sentimos, por que lo sentimos, cuanto camino llevamos andado y cuanto nos queda por andar. Planes, ilusiones, alegrías y penas todo batido y mezclado dentro de nuestra mente, jaula para unos, libertad para otros.

Al otro simplemente paz. Una mente sin ningún tapujo ni deseo, solo la mera supervivencia. Disfrutar de cada momento como si fuera el último, sin capacidad para pensar mas aya del momento que estamos viviendo. Que el presente sea el pasado y el futuro. Sin ninguna meta, sin ningún objetivo y con la felicidad por bandera.

Saltar desde lo alto de un tejado, y dejar que el viento agite mis alas. Que la corriente me lleve a los lugares mas recónditos del planeta con el único fin de disfrutar el instante en el cual vuele hacia la costa y las estrellas y el horizonte se fundan con el mar

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tu paz es repugnantemente relativa. Me quedo con la primera opción.